¿Por qué creemos que un widget puede ser muy útil, mientras tenemos una web con problemas de diseño y usabilidad o que no transmite nada? O un insulso motor que no ha sido mejorado en siglos, no utiliza técnicas CRO o cuyos mensajes de persuasión subliminal son inexistentes o equivocados (por ejemplo, sensación de urgencia en verde y refuerzo positivo en color rojo -lo contrario de lo que debería ser-).

En el sector hotelero vemos a menudo como los autodenominados “Consultores SEO” llevan a los hoteles a cometer auténticos desaguisados con sus presupuestos de marketing online.

A menudo, estos profesionales están más interesados en vender sus propios servicios que en asesorar correctamente al hotel. Ya sea por ignorancia, o por interés (o por ambas cosas), el hotel acaba invirtiendo recursos en acciones inútiles o con un bajísimo retorno de la inversión.

En este post quiero poner en relieve algunos aspectos del SEO y otras técnicas de marketing online cuando los aplicamos a una web de hotel, y el bajo impacto que suponen estas acciones, en contraposición al factor más determinante de para un sitio web de hotel, la conversión.

El CRO (Conversion Rate Optimization) es un conjunto de técnicas y metodologías que podemos aplicar a una web para aumentar el porcentaje de visitas que acaban realizando una reserva directa, es decir, aumentar la tasa de conversión.

La tasa media de conversión del ecommerce en España es del 1%. Este dato lo podemos hacer extensivo a las webs de hotel, que no son más que un tipo especial de tienda online.

El CRO (Conversion Rate Optimization) es un conjunto de técnicas y metodologías que aplicamos a una web para aumentar la conversión, es decir, el porcentaje de visitas que hacen reservas directas.